Fecha: 18/03/2012

Distancia: 51,30

Tiempo: 03:02:59

Tiempo en movimiento: 02:40:47

Pendiente max: 17,5 %

Velocidad máxima: 55,3 km/h

I.B.P.: 113 * 

Asistentes: ALO, Chino y Loné

Hoy la ruta ha comenzado en la Ermita de las Cruces (Don Benito). Esto de llevar las bicicletas dentro del coche tiene su gracia, sobre todo cuando abres el maletero de un Ford Ka y ves que podíamos haber llevado las tres bicis ahí ¡¡ qué máquina !!

La intención de hoy era la de buscar un enlace para unir dos rutas ya conocidas, la de la Sierra de Utrera con La Sierra de La Lapa, dos de los puntos por donde transcurrirá la “MTB CRUZ DEL RÍO EXTREME 2012” a celebrar el próximo 5 de abril y de la que ya os informaremos más adelante. Para ello ALO ha unido varios de los tracks que tenemos por esa zona, utilizando un tramo de la ruta a las Minas de San Nicolás en el Valle de la Serena. El resultado es que se pueden unir las dos sierras pero nos tocará hacer un par de kilómetros por carretera.

La Sierra de Utrera es una de las zonas más bonitas que hay por nuestra comarca y ya habían pasado casi dos años desde que hicimos esta ruta por última vez.  En el kilómetro 17 de la ruta está la entrada al Monte Utrera Pajosa y el acceso a la reserva cinejética.

Desde aquí 16 kilómetros entre pinares, alcornoques y venaos que esta ocasión no se han dejado ver. En el kilómetro 24 llegamos a un punto en el que tenemos que decidir si subir al castillo del Marqués de Pajosa. Esto implica desviarse del recorrido, salvar una diferencia de altitud de -93 m y +65 m, todo esto en un par de kilómetros para luego volver al mismo punto haciéndolo al contrario. Evidentemente hemos decidido hacerlo y como siempre ha merecido la pena. Tiempo para comer algo y disfrutar de las vistas antes de comenzar el camino de vuelta. 

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La parada no ha sido muy larga, pero los músculos se enfrían lo suficiente como para pasarlo mal en las subidas durante un buen rato. Tenemos 12 kilómetros por delante hasta llegar a la carretera del Valle. Hacemos poco más de dos kilómetros por la  carretera y llegamos al punto en el que se accede a la Sierra de La Lapa. Desde aquí hasta la Ermita de Las Cruces hay 10 kilómetros que hemos decidido hacer por carretera para finalizar antes la ruta. Aquí nos esperaba el famoso “reventón” que aunque hace tiempo que no lo hacíamos sabíamos que estaría ahí con su mala leche habitual. Como era de esperar lo hemos dado todo y las piernas han terminado muy muy cargadas.

Sin ser algo habitual, la jornada ha concluido con unas cañitas y unas ricas tapas en nuestra sede de El Rodeo, sin duda la mejor forma de reponer fuerzas y programar próximas aventuras.